31 mayo 2005



Otro clásico: José Martí.
Es un lugar común "poemizar" sobre rosas, pero estos versos siempre me parecieron distintos. La rosa blanca indistintamente para el amigo y al enemigo. Pero no entregada (no todavía), cultivada. Está como a la espera para ser ofrecida. Parece como si quisiera decir que ni el amigo ni el enemigo merecen la ofrenda de esta flor, no por ahora, aún cuando (eso sí) se la cultiva para ambos.
¿Posibles lecturas? Infinitas. Es increíble lo mucho que puede decirse con tan poco.

CULTIVO UNA ROSA BLANCA...
Cultivo una rosa blanca,
En julio como en enero,
Para el amigo sincero
Que me da su mano franca.

Y para el cruel que me arranca
El corazón con que vivo,
Cardo ni oruga cultivo:
Cultivo la rosa blanca.

27 mayo 2005



Sobre la palabra y sus potencialidades casi mágicas de evocar y ocultar las cosas, mucha gente ha escrito mucho. Y se han dicho grandes cosas... y muchas tonterías.
Quizás, entonces, convendría haber traido aquí a J.L.Borges, pero prefiero a Bernárdez, es más sugerente:

LA PALABRA
En cada ser, en cada cosa, en cada
palpitación, en cada voz que siento
espero que me sea revelada
esa palabra de que estoy sediento.

Aguardo a que la diga el firmamento,
pero su boca inmensa está callada;
la busco por el mar y por el viento,
pero el viento y el mar no dicen nada.

Hasta los picos de los ruiseñores
y las puertas cerradas de las flores
me niegan lo que quiero conocer.

Sólo en mi corazón oigo un sonido
que acaso tenga un vago parecido
con lo que esa palabra puede ser.

18 mayo 2005



Sí­. Esto es robado a un "blog" amigo; pero ocurre que su propietario no es muy ducho en estas artes informáticas, así­ que lo rescato.
El siempre inolvidable (J.M. Serrat mediante) Machado...

Leyendo un claro día mis bien amados versos,
he visto en el profundo espejo de mis sueños
que una verdad divina temblando está de miedo
y es una flor que quiere echar su aroma al viento.

El alma del poeta se orienta hacia el misterio.
Sólo el poeta puede mirar lo que está lejos,
dentro del alma, en turbio y mago sol envuelto.

En esas galerías sin fondo, del recuerdo,
donde las pobres gentes colgaron cual trofeo
el traje de una fiesta apolillado y viejo,
allí el poeta sabe el laborar eterno
mirar de las doradas abejas de los sueños.

Poetas, con el alma atenta al hondo cielo,
en la cruel batalla o en el tranquilo huerto,
la nueva miel labramos con los dolores viejos,
la veste blanca y pura pacientemente hacemos,
y bajo el sol bruñimos el fuerte arnés de hierro.

El alma que no sueña, el enemigo espejo,
proyecta nuesta imagen con un perfil grotesco.

Sentimos una ola de sangre, en nuestro pecho,
que pasa... y sonreímos, y a laborar volvemos.


Antonio Machado

16 mayo 2005

Baldomero Fernández Moreno. Parece que era famoso por sus interminables caminatas por Buenos Aires. Este poema, entonces, rompe con lo que tienen en común todos los demás. Podríamos decir que es intersticial a su vida cotidiana. Acá va:

Ella dice
-Esta noche no sales, te secuestro,
aquí está tu sillón, aquí tu lámpara,
tu pluma, tu tintero, tus cuartillas,
escribe, o lee, o sueña, o no hagas nada.
Esta noche no sales, te secuestro,
con mis tijeras cortaré tus alas.

Recorreré las piezas diligente,
iré, por ver la noche, a la ventana...
Fastidiaos, diré, hondas tinieblas,
rústicas brisas, estrellitas pampas,
esta noche no es para vosotras,
su meditar llena de luz la casa.
Aflojaré después las ropas mías,
esponjaré mi cabellera blanda,
te serviré un café como tú quieras,
escribirás las últimas palabras,
y verás qué reposo el de tu cuerpo:
de tu sillón, un paso, y a la cama.
Las almohadas creerás montón de flores,
frescas hojas las sábanas...

Y estarás dormitando todavía,
cuando entraré con silenciosa planta
a nuestro cuarto; tocaré tu hombro,
estirarás una pereza larga,
y ante tus ojos, de mis brazos puros,
rodará dulcemente la mañana.

09 mayo 2005

Algo cantado por Zitarrosa, ignoro si es de su autorí­a. Pero creo que es la mejor conjunción de metáforas simples (y hasta infantiles, por lo básico) que conozco.


.



LOS BOLICHES
Otra vez los boliches nocturnos
amarillos de sueños perdidos
quinieleros de suertes extrañas
opacados en humos y vinos.

Viejas radios rezongan canciones
y un Gardel arrullando su trino
y en la mano madera de un tango
un borracho camino al ayer

Desgastadas paredes que miran
sin fervor, sin asombro las cosas
por el ojo de buey descordado
de un reloj que hizo el tiempo y murió

Opacados espejos que imitan
otra vida mejor , o la misma
marionetas de pan en la niebla
tras un sol empapado de alcohol

La soledad con el alcohol
suelta un gorrión
que por el aire del alba voló

Con el alcohol, la soledad
tibio gorrión
que por el aire del alba se va.....


El boliche conversa en silencio
sus palabras de vino y tabaco
cuando llueven las sombras florecen
desolados versos de papel

Los amantes se buscan el alma
naufragados de ausencias preguntan
el destiempo les duele en la sangre
laberinto de mar el amor.

05 mayo 2005

“...Vosotros estaréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en gozo.” (Jn 16,20)

"El Salvador dice a los discípulos que el se va por un tiempo, que ellos se entristecerán y que el mundo se alegrará. Pero esto es bueno para ellos. Su apego humano a la persona de Jesús era demasiado grande, él tenía que separarse de ellos para que pudieran recibir interiormente su Espíritu. Así, también, es bueno para nosotros, si se nos quita el consuelo humano, el apoyo por medio de un representante humano, y hasta si ese nos quitan siempre consuelos para que se reciban acciones espirituales más profundas. Podemos entristecernos de la ausencia del Señor y de que el “modicum” se nos haga largo, pero debemos estar seguros de que el no nos deja solos".
Santa Teresa Benedicta de la Cruz, Edith Stein (1891-1942) carmelita descalza, mártir, co-patrona de Europa
Cuadernos de Notas personales, Ejercicios 1937, Obras completas, EE.VV. Burgos 2004, pag. 846-847


La tristeza convirtiéndose en gozo por ausencia de intermediación humana en el consuelo y la presencia ("por medio de un representante humano"). Es la alegría, el gozo que, a su pesar es doloroso, del momento en que nos cortan los puentes con lo humano. Cuando estamos solos, solos ante lo inefable, aunque más no sea para el consuelo, para ser consolados. Sólo Edith Stein (y algunos otros pocos) pueden hablar sobre esto.

04 mayo 2005

Algo de Vallejo leído al pasar. Tiene fuerza y decepción. Me gusta.

LOS HERALDOS NEGROS
Hay golpes en la vida, tan fuertes… Yo no sé!
Golpes como del odio de Dios; como si ante ellos,
la resaca de todo lo sufrido
se empozara en el alma… Yo no sé!

Son pocos; pero son… Abren zanjas oscuras
en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte.
Serán talvez los potros de bárbaros atilas;
o los heraldos negros que nos manda la Muerte.


Son las caídas hondas de los Cristos del alma,
de alguna fe adorable que el Destino blasfema.
Esos golpes sangrientos son las crepitaciones
de algún pan que en la puerta del horno se nos quema

Y el hombre… Pobre… pobre! Vuelve los ojos, como
cuando por sobre el hombro nos llama una palmada;
vuelve los ojos locos, y todo lo vivido
se empoza, como charco de culpa, en la mirada.

Hay golpes en la vida, tan fuertes… Yo no sé!